Lecciones de temporada

Terminó la temporada 2013/14 con los Seattle Seahawks como indiscutidos campeones de la NFL. Nadie lo duda y en la final lo demostraron. Pero la temporada fue más que eso, más que la gran victoria de los Seahawks. Dejó muchas conclusiones, lecciones y cosas como deja cualquier temporada.

Esta campaña no quedó atrás, dejó cosas para ver, nuevas conclusiones y lecciones. Por ello, repasamos diez enseñanzas que dejó la temporada 2013/14 de la NFL.

Chip Kelly puede dirigir en la NFL
A esta misma altura, pero en 2013 Kelly firmaba su vinculo con los Philadelphia Eagles. Muchos interrogantes existían acerca de su adaptación a la NFL siendo un entrenador de éxito en el College. Abrió el campeonato con una victoria, y si bien tuvo algunos traspiés en el principio, cuando el equipo ofensivamente se afianzó, todo fue bueno. Elevó más aun a LeSean McCoy y el ataque terrestre fue el mejor de la liga. Encontró un pasador que tuvo un año fenomenal como Nick Foles, en diez partidos, garantizó ser al menos el pasador de los Eagles un par de años más. Kelly tuvo gran capacidad para la ofensiva, aunque la faceta defensiva quedó a deuda. Igualmente, mucho merito otra vez ser un novato como coach y llevar a su equipo a ganar la división y llegar a los playoffs. Kelly demostró que puede dirigir en la NFL.

Los Browns sin solución
Esta temporada parecía un renacer para los Browns con Rob Chundsinski a la cabeza. Josh Gordon y James Cameron emergieron como dos opciones fenomenales y la defensiva demostró ser de confiar. Pero el mariscal fue el tema de cabecera. Brandon Weeden fracasó y cuando Brian Hoyer empezó a mostrar grandes cosas, se lesionó y quedó. A partir de allí, todo fue para peor. Empezaron a perder y el liderazgo que habían tenido momentaneamente en el norte, se transformó en ser el peor de la tabla. Chudsinski se fue y los Browns sumaron otro fracaso.

Lo mejor esta en el oeste
Como en algún momento hemos dicho que el oeste de la NFC era la "conferencia de trapo" hoy podemos afirmar con tranquilidad que es la mejor división hoy por hoy en la NFL. No solo se ubica Seattle, campeón indiscutido, sino que San Francisco también, que estuvo a un paso de llegar al Super Bowl. Arizona logró un récord bueno, pero no llegó, una lastima, vencieron a Seattle en Qwest Field y realmente son un equipo fuerte. No haber clasificado con marca de 10-6 es una injusticia. Los Rams decepcionaron un poco, aunque una marca de 7-9 no es propia de un sotanero, con lo cual queda demostrado el nivel del oeste. Además son todos equipos con bastantes jugadores jóvenes y un futuro prometedor. Si sigue todo así, será una de las mejores divisiones por mucho tiempo.

El año del QB suplente
Esta temporada los mariscales de campo suplentes tuvieron que dar la cara en varias ocasiones, especialmente en equipos que luchaban por el campeonato. EJ Manuel se lesionó bastante y jugó 10 juegos, aunque con interrupciones. Geno Smith también tuvo sus lesiones, pero terminó jugando. Cleveland ni hablar, tuvo que rotar y especialmente rotar sin mucho talento. Matt Schaub perdió el puesto por lesión y malos rendimientos, apareciendo un prometedor Case Keenum. Jake Locker estaba jugando bien y tuvo que cederle el lugar a Ryan Fitzpatrick. Terrelle Pryor también estuvo lastimado y le cedió el lugar a Matt McGloin. Sam Bradford fue otro que empezó bien y una lesión lo interrumpió. Josh McCown reemplazó a Jay Cutler e hizo replantear a todo Chicago si podía ser el futuro de la franquicia. También estuvieron los que hicieron cambios, Minnesota utilizó tres mariscales distintos con pésimos resultados. Tampa lo mismo, mientras que Washington nunca puso bien a RG3 y terminó con Kirk Cousins. También Matt Flynn que salvó al equipo sobre el final, aunque sufrió mucho.

Sin dudas, los mariscales suplentes tomaron un papel preponderante en la temporada, producto de un año complicado de lesiones que contaremos más adelante.

Miami no esta listo aun
Los Dolphins no hicieron un mal año, pero lo si su cierre fue mediocre. Tenían todo para entrar a los playoffs, nadie lo podía evitar, dependían de ellos mismos, pero el pánico escénico los mató. Tras ganarle a los Patriots, que en las últimas temporadas parecía tarea imposible, perdieron los dos últimos juegos ante equipos mediocres del estirpe de Bills y Jets. No supieron cerrar y los errores en el juego los pagaron caro. No relucieron en todas las áreas, fueron un equipo medio pelo en general, pero inteligentes y oportunistas en algunos juegos. Pero les faltó el toque final y lo pagaron. Joe Philbin está construyendo algo interesante, pero aun falta un poco más.

Carolina demostró que puede ganar
La temporada empezó mal para los Panthers. Para la semana 5, estaban con récord 1-3 y jugando bastante mal. A ver, mejor dicho, no jugando mal, tomando malas decisiones como en las temporadas anteriores. Ron Rivera estaba cuestionadisímo y tenía todos los números para irse temprano. Pero supo dar una vuelta de rosca, un cambio para mejor. Se volvió una defensiva más agresiva y una ofensiva de más riesgo. Ojo, la formula no era nada extravagante, pero si algo efectiva. Ganaron ocho juegos en fila y ante rivales importantes. Luego perdieron dos más, pero el resto lo ganaron. Terminaron ganando la NFC Sur y si bien tienen que ganar en playoffs, demostraron que pueden ganar, algo que en las últimas temporadas no pasaba.

La mejor camada
Esta temporada quedó demostrado algo que veníamos diciendo hace rato, la camada de mariscales de campo del 2012 es de las más destacadas en la historia de la NFL y todavía no escribió tantos capítulos. Russell Wilson escribió el primero bien grande, y si bien, RG3 no tuvo un gran año, Nick Foles apareció con un nivel fabuloso que asombró a propios y extraños. Andrew Luck se adueñó del sur de la AFC y emergió como un mariscal capaz de levantar juegos increíbles. Ryan Tannehill sigue en crecimiento. Pero sencillamente con Wilson, Luck, Griffin III y Foles hay una gran camada, totalmente amplificada por esta pésima del 2013.

Las lesiones afectaron a equipos y al espectáculo 
Si bien este año se volvieron a batir récords ofensivos, el espectáculo sufrió la perdida de varios jugadores importantes por lesiones. Especialmente ofensivos, aunque también hubo defensivos importantes. Esto afectó el juego y algunos equipos considerablemente. Entre los notables lesionados tenemos: Rob Gronkowski, Jerod Mayo, Vince Wilfork, Dennis Pitta, Geno Atkins, Arian Foster, Reggie Wayne, Von Miller, Ryan Clady, Sam Bradford, Patrick Willis (gran parte de la campaña), Doug Martin, Roddy White, Julio Jones, Steven Jackson, Aaron Rodgers, Jeremy Maclin, Randall Cobb, Victor Cruz, entre otros muchos más. Sin dudas, algo que afectó en cierto punto el espectáculo de la NFL.

MVP sin discusiones
A pesar de jugar mal la final ante Seattle, Peyton Manning fue el MVP sin excusas de la temporada. Lideró a su equipo a un récord 13-3, final de Super Bowl, logró el récord en touchdowns en una temporada y en yardas ¿Alguien dudaría de dárselo? No, por eso fue el más valioso y también el mejor ofensivo. El defensivo fue Luke Kuechly, otro joven que se catapulta como estrella, mejor dicho, ya es estrella. El Comeback fue para Phillip Rivers, por un regreso al gran nivel. Mientras que los galardones de novatos fueron para el ofensivo Eddy Lacy y el para el defensivo Sheldon Richardson.

Los equipos a seguir en 2014
Queda claro que Seattle con la juventud de su plantel tiene quizá para ser contendiente varios años más si continua haciendo las cosas bien. Los Broncos, mientras esté Peyton Manning también, lo mismo que los Packers, Patriots y Saints si mantienen a sus mariscal. San Francisco también tiene juventud y un gran equipo. Pero el foco lo tenemos que hacer en los equipos que seguirán creciendo a medida que pasen las temporadas. Indianapolis, Cincinatti, Carolina, Kansas y Eagles. Como así también hay algunos que se pueden meter en la conversación y ocupar el lugar de alguno de estos si hacen las cosas bien. Arizona, Chicago, Detroit, Dallas, Atlanta, San Diego, Houston, Baltimore, Pittsburgh y Miami. Atentos a los drafts y contrataciones de estos últimos.