Todos contra Weeden

Ni bien los Cleveland Browns escogieron a Brandon Weeden, se desataron grandes polémicas. Era algo lógico, ya que habían gastado su segundo pick de primera ronda en un mariscal, pero no cualquiera, sino uno de veintiocho años.

Más allá de que había jugadores talentosos disponibles a esa altura, los Browns optaron por Weeden. Recordemos que hace dos años, ellos reclutaron a Colt McCoy, un mariscal que tiene tres años menos que Weeden y dos más de experiencia como NFL. Aunque me parece que la directiva de Cleveland ya lo ve como otro fiasco.

En realidad, los Browns querían reclutar a Kendall Wright, pero los Titants lo escogieron antes. Por eso optaron por el plan de Weeden. Criticado es cierto, pero también quizá renueva una nueva esperanza en una liga en donde la edad de los mariscales no cuenta tanto como el buen talento.



¿Quien dijo que un mariscal es viejo a los 28 años? En la NCAA seguro que sí, ya que se renuevan los jugadores constantemente. Pero en la NFL no, quizá un poco para aprender gajes del oficio, pero para el desarrollo no afecta la edad.

Pensemos lo siguiente, Brett Favre y Kurt Warner jugaron hasta los cuarenta años profesionalmente. Ya se que ambos son astros del football americano, pero porque Weeden no podría serlo. Seguramente su carrera no será prolongada como Favre, pero si puede le puede alcanzar para ser un solido mariscal de campo.

Algo está claro, Cleveland no es la meca para el pase. Tiene receptores jóvenes como Greg Little y alguno versátil como Josh Cribbs, pero ningún número uno. Veremos si puede explotarlos de algún modo, aunque considero que tendrá el apoyo de un juego terrestre. Los Browns quieren corren eficientemente y por ello tomaron a Trent Richardson.

En cuanto a lo que es Weeden como jugador, es intachable su paso por los Oklahoma State Cowboys. Allí batió numerosos récords. En 2011 lanzó 4727 yardas y 37 pases de touchdowns. Y no solo eso, también batió a los mejores mariscales de este Draft y otros. Le ganó en temporada regular a Robert Griffin III, Ryan Tannehill y Landry Jones. Y también hay que agregarle el Fiesta Bowl ante Stanford, en donde en un duelo de pasadores se impuso ante Andrew Luck.

Por eso, si lo van a criticar en cuanto a carrera colegial, carecen de fundamentos, ya que Weeden venció a todos los que son considerados mejores que él.

Eso sí, tendrá que competir de entrada con Colt McCoy de quien no se sabe como le cayó la noticia, a pesar de que su entorno declaró que él es todo un profesional y luchará por ser el titular.

La cuestión recae en que tanto Pat Shurmur como Mike Holmgren inclinan la balanza ante Weeden, ya que lo ven maduro, además de que lanza y más fuerte que McCoy. Esto último es muy importante en una división con tantos golpeadores como James Harrison, Lammarr Woodley, Ray Lewis, Terrell Suggs, entre otros.

"El nivel de tu mariscal es clave para cualquier equipo. En este negocio tu equipo es tan bueno como tu mariscal", declaró Holmgren, voz autorizada si las hay.

En definitiva, esta es otra apuesta de Cleveland. Podrá salir mal o bien, pero ellos sabían que McCoy era una apuesta sin sentido. Quizá el ex Longhorns se destape tras la presión de Weeden, pero parece difícil. La cuestión es que si Weeden logra ser titular, tendrá que demostrar que es por lo menos un mejor lanzador que sus suplentes. Considero que tendrá más ayuda de una doble amenaza como Richardson, o de algunos receptores jóvenes que avanzan. Solamente el futuro indicará si esta apto o viejo para liga.