Los Ravens fueron los mejores cuando había que serlo

Es raro encontrar en la NFL un equipo que salga campeón y que haya sido el mejor durante todo el año. Es algo realmente difícil en una liga tan pareja y competitiva. Quizás en años anteriores era algo más posible, pero en la actualidad no. Sino fíjense porque desde aquellos Patriots 2003 y 2004 nunca más hubo un bicampeón en la NFL.

Y esto toca directamente a estos Ravens que como muchos dijeron, no fueron los mejores durante todo el año, todo lo contrario. Pero si fueron los mejores cuando había que demostrar ser los mejores.

A continuación un análisis de porque los Ravens son los actuales campeones

Hasta el domingo negro en donde los Ravens perdieron a su esquinero estrella Lardarius Webb y al líder Ray Lewis, Baltimore se encaminaba a otra temporada en donde iba a pelear la NFC Norte y por el buen arranque que tenía se ponía las fichas de que iba a ganar la división con más holgura que otros años. Esto sucedió en la Semana 6 y los Ravens tenían hasta allí un récord de 5-1.

Después de esto todo se hizo cuesta arriba. Fueron apaleados por Houston jugando muy mal. Luego aprovecharon la semana libre y tuvieron la fortuna de jugar contra rivales como Cleveland, Oakland, San Diego y un Pittsburgh sin Ben Roethlisberger. En ese panorama lograron cuatro triunfos valiosos que los hicieron estirar hasta el final.

Luego vino una racha negativa ante equipos que peleaban por clasificar como Denver, Washington y otra vez Pittsburgh. Para ese entonces la critica era que Baltimore lograría clasificar, pero que por lo mostrado ante rivales directos mucho no le quedaría en chances de playoffs. La victoria con los Giants le dio ese triunfo para clasificar.

Como repasamos anteriormente en la nota sobre la buena decisión de poner a Jim Caldwell como coordinador ofensivo, fue por esas semanas y se dedicaron a aceitar la ofensiva para la postemporada. A la larga, las criticas en la temporada regular se callaron rápidamente cuando los éxitos llegaron en los playoffs.

¿Quienes eran los grandes candidatos antes de empezar la postemporada? Atlanta, San Francisco, Denver, New England y aparecían como caballos negros los equipos de Seattle y Green Bay. En ese contexto jamás apareció Baltimore y todos pensaban, incluso yo, que el sueño y la carrera de Ray Lewis terminaba en Mile High. Nada de eso sucedió y luego de mostrarle las credenciales al joven equipo de Indianapolis, hicieron lo propio con Denver en un partido puramente de playoffs, en donde hubo emoción hasta el último segundo.

La final para llegar al Super Bowl fue a mi criterio el mejor partido de la temporada para los Ravens. No solo maniataron a los Patriots en ofensiva, sino que le pudieron anotar y mantener una ventaja que nadie creía posible como visitante. Muchos opinarán que este equipo se recibió de campeón esa jornada, pero faltaba la prueba más difícil. Como repasamos ayer, aprovechando los momentos, siendo incisivo cuando más importaba, los de Harbaugh hicieron una primera mitad asombrosa que les permitió aguantar todos los embates del equipo más completo de la NFL. Fueron campeones sin ser a mi criterio los mejores de la temporada, sino que fueron los mejores cuando había que demostrarlo.

¿Lo estoy juzgando como campeones? Para nada, son merecedores de ese premio porque vencieron a los mejores. A los número uno y dos de la AFC como Patriots y Broncos y al campeón de la NFC. Pero como dije y repasamos anteriormente, en la temporada regular por lesiones y otras cuestiones no pudieron demostrarlo como si lo hicieron en playoffs.

Packers y Giants en sus respectivos campeonatos llegaron de punto. Packers como comodín y Giants ganando su división con un flojo récord. Pero al igual que estos Ravens supieron ser los mejores en los momentos clave. Por eso repito, en esta NFL para ganar es importante ser el mejor en temporada regular o mantenerse con chances, porque es aun más importante llegar en un gran momento a los playoffs.