miércoles, 11 de marzo de 2015

La deconstrucción



Claramente ha terminado un gran ciclo en San Francisco. La previsible ida de Jim Harbaugh a final de temporada, crónica de una salida anunciada tras un mala temporada con distintas asperezas. Aunque personalmente referiré siempre que Harbaugh era un buen valor para este equipo.

En las últimas semanas y en medio de una vorágine tremendamente particular que nos ofrece este periodo de agencia libre, han decidido el retiro del football americano profesionales dos pilares fundamentales de la estructura del equipo como son el apoyador medio Patrick Willis y el tackle defensivo Justin Smith. Dos estrellas, jugadores imprescindibles, tómelo como quiera, pero dejarían el football americano.

A todo esto se suma las salidas del corredor histórico Frank Gore y el guardia de Pro Bowl, Mike Iupati.

También han llegado figuras como Torrey Smith, ex receptor abierto de los Baltimore Ravens o el gigante Darnell Dockett, ex Arizona Cardinals. Pero nada será lo mismo. El nuevo Head Coach, Jim Tomsula tendrá que darle una nueva imagen a este equipo, lo cual siempre es difícil.

San Francisco se ha desmembrado con el objetivo de rearmar su futuro. ¿Podrá en poco tiempo renovar su identidad? Antes que todo, un breve repaso del proceso exitoso proceso Harbaugh.

La polémica salida de Harbaugh
Siempre he dicho, y no sólo yo, los grandes jugadores de football americano y analistas, la importancia en la identidad de juego de cada equipo. Los equipos que la poseen, ya están aceitados, no ganan todos los juegos milagrosamente ni mucho menos, tienen un funcionamiento que va más allá de buenos nombres. El caso que más demuestra mi teoría es el de los Patriots. La identidad estuvo siempre, pasaron jugadores, sistemas, etc, y esa identidad permanece, alguna que otra vez con algún cambio, pero siempre renovada y viva. Así se llega a más de 10 años de ser una franquicia que ha ganado todo y que siempre es el rival a vencer.

Antes de que Jim Harbaugh llegará, la franquicia estaba a la deriva en lo deportivo. Lejos de ser lo que alguna vez fue en los 80 y 90, era un equipo con buenos nombres, pero pésimo funcionamiento. Sin rumbo alguno. Dennis Ericksson, Mike Nolan y hasta el "Samurai", Mike Singletary que con su discurso de "mano dura" tuvo el vestidor en contra bastante rápido. Harbuagh llegó después de varios años exitosos con los Stanford Cardinal y le cambió la cara en una temporada. Ordenó el equipo y le dio confianza y juego a jugadores que estaban ocultos, caso Navorro Bowman.



En su primer año, llegó a la final de Conferencia Nacional, que si no hubiera sido por los fumbles de Kyle Williams, los tenía en la final. Al año siguiente llegó al Super Bowl, en donde finalmente perdió con los Baltimore Ravens en lo que se denominó el "Harghbowl", puesto que jugó contra el equipo de su hermano John. Y en 2014 llegó otra vez a la final, la cual estuvo a pulgadas de ganarle a los Seattle Seahawks, posteriormente campeones.

Esto resalta el gran proceso que fue el de Harbaugh, en donde se destacaron muchísimos jugadores, entre los que más se destacan Navorro Bowman, Michael Crabtree, Colin Kaepernick y Aldon Smith.

Por supuesto que en el punteo de las primeras tres campañas de Harbaugh nos estamos olvidando la última, la más polémica y detonante para que este proceso acabe. Colin Kaepernick en un mal nivel, a mi criterio producto un plan de juego que no se adaptó a sus características. Y las lesiones, gran causante, San Francisco fue un hospital la temporada pasada. Todo eso, más algunas críticas exacerbadas produjeron en la dirigencia la decisión indeclinable de echar al coach. Otro entrenador que al igual que John Fox se va por un año malo contra cuatro buenos.

Llegó Tomsula a reconstruir lo que parecía construido 
Ha llegado Jim Tomsula, que fue el coach interino de los 49ers, conoce bien el paño y a sus jugadores. Aunque el éxodo parece esta a pleno en la bahía. En los último tiempo se ha ido, Jonathan Goodwin (centro titular), Delanie Walker (ala cerrada), Mike Iupati (guardia), Frank Gore (corredor) y se sumaría Michael Crabtree (receptor) a la lista en la ofensiva.

Defensivamente, las salidas han sido peores los últimos dos años. Patrick Willis (apoyador interno) y Justin Smith (ala defensiva) por retiro, los tackles defensivos Ray McDonal e Isaac Sopoaga, los esquineros Tarrell Brown y Carlos Rogers, más los profundos Dashon Goldson y Donte Whitner.

No olvidemos a David Akers (pateador de lugar), los especialistas en retornos Ted Ginn y LaMichael James, los esquineros reservas como Perrish Cox y Chris Culliver y el apoyador estrella Ahmad Brooks también podría ser cortado.



En dos años se ha desmembrado la matriz de esta franquicia, a lo que ni las contrataciones de agencia libre ni los Drafts dan a tiempo para amalgamar semejante estructura.

Tomsula trabajará al momento entre los conocidos y titulares con Colin Kaepernick (mariscal de campo), Vernon Davis (ala cerrada), Joe Staley (tackle), Alex Boone (guardia) y Anthony Davis (tackle). Los defensivos Eric Reid (profundo) y los apoyadores Navorro Bowman y Aldon Smith. También se quedó el pateador de despeje de Pro Bowl Andy Lee.

Si bien han llegado jugadores del calibre de Torrey Smith y Darnell Dockett, es poco material el que presenta. Tomsula tendrá una tarea titaníca y complicada en una de las divisiones más poderosas de toda la NFL.

No creo que Tomsula sea culpable, aquí Jed York tiene las características de ser el malo de la película. Error costoso ha cometido en no bancar a Harbaugh. Muchos dicen que el vestidor está en el mejor de los ambientes y cuando el camino se ponga sinuoso, el nombre y el recuerdo de Harbaugh vendrá inmediatamente. York quiso elevar a Tomsula, pero realmente no lo ha protegido.

Mis mejores años, fueron con Jim... él estaba aquí y nosotros ganamos", dijo Frank Gore jugador que se fue rápidamente a otro equipo tras 9 años en la bahía.

La deconstrucción ha llegado a San Francisco.

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