Nadie discute a Danny Wuerffel como ídolo de la Universidad de Florida, es más creo que si no fuera por la era de Tim Tebow en este tiempo, este jugador seguiría siendo el más exitoso junto con Steve Spurrier, quien esos años fue su coach.
Llego a Gainesville en 1993 y a partir de ahí comenzó a demostrar su talento partido a partido. Acompañado por jugadores como Fred Taylor, Ike Hilliard, Reidel Anthony, Jacques Greene, Jevon Kearse, Jeff Mitchell, entre otros, Wuerffel llevó a los Gators a ganar cuatro años seguidos la conferencia del sureste (SEC). Pero el problema de este equipo se llamaba Nebraska o su rival Florida State que lo vencía en la final. Aunque la revancha tuvo un gusto muy especial, ya que fue en el campeonato nacional del 96´ y allí vencieron a los Seminoles por 52-20, para coronarse por primera vez en la historia en la NCAA FB.
Ese había sido el año de gloria del gran Danny, que además de terminar con su equipo en la cima, fue elegido ganador del Trofeo Heisman. Pero ese no fue el único palmar que recibió, sino que también se llevo el Trofeo Draddy, el Sammy Baugh, John Unitas, Maxwell Award, Walter Camp y QB del año. Y hay que el premio David O´Brien que se lo adjudicó en 1995 y 1996. Por supuesto que siempre fue All-American y que además quedó disitinguido como ídolo en la Universidad de Florida.
Terminó su carrera Gator completando 708 de 1,170 pases para 10,875 yardas con 114 pases de touchdown, el mejor en la historia de la SEC y la segunda más importante en la historia de la universidad. Su índice de eficiencia de 163.56 fue la mejor en la historia de la universidad y su porcentaje de pases fue de 9,74. Ocupó el primer lugar en la historia colegial. En 1995, su índice de eficiencia de 178.4 estableció un récord colegial en una temporada. Durante su temporada Heisman completó 207 de 360 pases para 3,625 yardas (un registro de la SEC a la hora) para 39 touchdowns (líder nacional) y su índice de eficiencia de 170.6 lo convirtió en el mariscal de campo primero en publicar alguna vez una clasificación así.
Al llegar a la NFL sus numeros mucho no importaron, aunque la duda de sí podía jugar en la maxima categoría se hacía frecuentemente. En el Draft cayó bajo, fue escogido por los Santos de Nueva Orleans en la cuarta ronda. Estuvo seis temporadas en la NFL, allí estuvo en el equipo ya mencionado, en Chicago, Washington y Green Bay, hasta de dejó la liga.
Antes de decirle adiós a la carrera de jugador de futbol americano tuvo un logro más, salió campeón de World Bowl 2000 con el Rhein Fire, en ese torneo fue elegido el mejor jugador.
Intocable en Gainesville e uno de los maximos idolos de la Universidad de Florida, Danny Wuerffel no había sido hecho para la NFL, fue mucho ruido y pocas nueces.
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