Rob Gronkowski, la llave maestra de los Pats

No hay que un equipo de NFL la pieza clave para que la ofensiva funcione es el mariscal de campo. Quizá en otros equipos es el corredor, pero en los que tienen aspiraciones grandes, es QB termina siendo vital.

En New England la premisa es algo parecida, aunque casi a la par del mariscal se encuentra el ala cerrada, que cubre su posición y la de receptor abierto.

Rob Gronkowski es para los Patriots la llave maestra, el mejor aliado de Tom Brady y el que rompe los esquemas defensivos.

Ya habíamos hablado de esto en la nota acerca de Jimmy Graham, quien junto con Gronkowski son los mejores de la liga. La razón es que además de buenas manos, su gran tamaño los hace imposibles de detener. Para los apoyadores por un tema de velocidad, para los profundos un problema de tamaño.


Gronk, como lo apodan, llegó a Foxborough el año pasado. Elegido en la segunda ronda del Draft llegó de Arizona State con esperanzas de destacarse, aunque un tenía por delante un compañero suyo, Aaron Hernandez. Una dupla que en la actualidad se las trae.

En 2010, demostró talento, especialmente en un touchdown en donde arrastró varias yardas a James Laurinaitis para anotar.

El 2011 es sin duda el año de la consagración de Gronkowski. A mi gusto, actualmente es el mejor ala cerrada de toda la NFL, peleando mano a mano con Jimmy Graham. Ambos son parecidos, jóvenes, buenas manos y un tamaño y polenta increíble.

Hasta el momento, suma 15 anotaciones, 1141 yardas y 75 recepciones, siendo de además uno de los objetivos favoritos de Brady, el jugador con más anotaciones aéreas de la campaña y el séptimo en yardas por recepción.

Gronk se ha convertido en una sensación esta campaña, no se si ganará el ofensivo del año, porque Drew Brees ha hecho una campaña excepcional, pero sin dudas merecer algún reconocimiento por tal temporada. Cambiando de tema, también fue una sensación por sacarse fotos y negarse a tener relaciones con la actriz pornográfica Bibi Jones.

Del nivel de este jugador mucho hay que aplaudirle a Bill Bellichick, simplemente porque lo hizo de nuevo y de un prospecto que no muchos se fijaban, sacó un jugador estelar.

En definitiva, a este paso Rob Gronkowski podría convertirse en uno de los alas cerradas más importantes de la historia, a la altura de Tony Gonzalez o Antonio Gates. Por el momento tiene una gran ventaja, es joven y tiene aún más para dar en un equipo que se destaca año a año y que usa a alas cerradas como Gronk como llaves maestras para ganar los partidos.