New Orleans
está 3-0 en el arranque de la temporada. Un equipo que desde que supimos la
vuelta de Sean Peyton, teníamos la intuición que iba a mejorar
considerablemente su rendimiento con respecto al año anterior teñido de escándalos.
No se si
decir que el premio a entrenador del año tendría que ir ya para Sean Peyton,
todavía es muy temprano, pero lo cierto es que es el principal candidato si la
votación cerrara en este momento. Su vuelta fue mucho más que un regreso, le
dio una confianza y un equilibrio increíble a un equipo que lo necesitaba tras
uno de los escándalos más cuestionados de la historia.
Otro de los
culpables de este es Rob Ryan, le ha dado una identidad impresionante a la defensa.
Era la peor del año pasado, ahora es la quinta mejor en la liga y con una
ofensiva número seis, el equipo ha encontrado un equilibrio perfecto.
¿Cuáles son
las claves de este equipo?
Primero
antes que nada, si siguen con estos números, no habrá quien los pare. Sabíamos
que eran una ofensiva de alto voltaje. De hecho el año pasado eran el mejor
ataque y la peor defensa. Esa diferencia no los podía llevar a ningún, porque
agrandaban a cualquier mariscal rival. Les anotaban muchos puntos, eran todos
los partidos tiroteos. Esa diferencia tan mala, era perjudicial.
Ahora es
distinto. Gran parte acción de Peyton y mucha más de Ryan. Lo importante es el
espacio que el Head Coach le ha dado al coordinador defensivo, de moverse con
facilidad, de imprimirle a la defensiva su firma. El cambio de sistema favoreció
aquello.
Lo que más mejoró
fue la secundaria, todavía les duelen los corredores rivales, pero lo cierto es
que se mueven bien atrás. Allí se lo ve mucho más sólido al equipo, la presión
colabora con ello, pero las marcas están mejor. Hay un trío de esquineros bueno
y el pase de Malcolm Jenkins fue muy bueno. Kenny Vaccaro es real y esto también
colabora en que la secundaria sea una unidad consistente.
Ojo, si
bien la defensiva se ha puesto el cartel de figura, sin recibir hasta en lo que
va de la temporada más de veinte puntos. El motor de este conjunto sigue siendo
la ofensiva. Drew Brees sigue siendo el hombre en este equipo, quien lidera y
la defensiva es un complemento perfecto a todo esto. Una ayuda inesperada, o
quizá esperada por el trabajo de pretemporada, en lo que significaron las
victorias que han obtenido los Saints esta temporada.
La lesión
de Lance Moore preocupa, pero hay que decir que Jimmy Graham sigue intratable y
Marques Colston es un jugador de élite en la
NFL. Luego, Brees es de esos jugadores
capaces de potenciar receptores sin problemas.
La deuda
pendiente es el juego por tierra. Darren Sproles es excelente, pero no es para
liderar un equipo por tierra, no es un running back clásico, necesita otro más.
Pero también hay que decir que el fuerte de este equipo es el pase y es lógico
que la corrida este relegada, igual tienen que tener en cuenta que la utilizarán.
En cuestión,
New Orleans es uno de los invictos de este año. No sabemos como será su futuro,
pero lo cierto es que su arranque ha sido fabuloso. Vencieron a los Falcons,
Tampa (dos rivales de división, algo clave) y Arizona. Ahora irán por Dolphins,
otro de los invictos. Lo cierto es que poco a poco se parecen a los de antes,
ahora los seguirán más de cerca los rivales, por ello veremos si lo pueden
mantener.
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