Nadie lo puede dudar, creo que a esta altura nadie piensa que Darrelle Revis siga siendo el mejor esquinero de la NFL. Ni él, ni Champ Bailey, que quizá haya sido el mejor de la historia, pero actualmente no. Como así también podemos nombrar a Patrick Peterson, Antonio Cromartie u alguno más, Sherman es el mejor.
Lo hemos dicho en notas anteriores "Great players make great plays", así fue Sherman el otro día ante San Francisco. Y apareció en el momento justo, cuando su equipo, mejor dicho, cuando una ciudad lo necesitaba, mostró la magia.
Hoy criticado por algunos dichos a Michael Crabtree y algunas respuestas con poco espíritu deportivo, Sherman lo apuntan con falta de humildad. Más allá de eso, hoy es el mejor y creo que nadie ahí se lo puede discutir.
Si vamos a los sucesos del otro día, primero voy a decir personalmente que no comparto lo que hizo Sherman, estuvo mal realmente. Pero contextualicemos y quizás entendamos, aunque no compartamos. Los Seahawks estaban a un paso de lograr el boleto al Super Bowl, San Francisco venía ejecutando una ofensiva tremenda que los encajonó rápidamente. Estaba cerca la voltereta para los 49ers y en una jugada, que voy a decir que fue apresurada, Kaepernick arriesgó un pase, Sherman hizo un jugadon para que su compañero lo intercepte. Si nos ponemos en ese contexto, de encima jugar en casa con esa gente y ese ruido, estaríamos a favor del esquinero, o mejor dicho, entenderíamos.
Otra cosa también, todos los esquineros son un poco polémicos. Al igual que los jugadores defensivos, intentan amedrentar al receptor al ofensivo, a quien sea. No es de mala leche, es una cuestión de juego, de ponerle pimienta, algunos no lo hacen y la rompen igual, otros lo hacen y les va bien.
El punto es que uno de los grandes baluartes de los Seahawks es Richard Sherman, jugador clave a quien en el Super Bowl, Peyton Manning tendrá que vencer y que imagino bien cerca de Demaryius Thomas. Junto con Kam Chancellor y Earl Thomas, aunque tampoco le quiero restar merito a Brandon Browner, hoy suspendido, son la mejor secundaria de la NFL, o al menos, la más agresiva.
Sus ocho intercepciones marcan un alerta grande "No lances allí". Esto último es algo clave que tendrá que combatir Denver, aunque de eso, hablaremos más adelante.
Lo cierto es que Sherman es hoy quien tiene la posta de ser el mejor esquinero de la NFL, posta que le quitó a Revis y que durante más años tuvo Bailey, a quien tendrá enfrente esta temporada. También tenemos que decir que su llegada a la NFL no fue fácil, tuvo varias complicaciones en la universidad, donde comenzó de receptor y terminó de esquinero. Y no es que era malo como receptor, era bueno, pero luego de una lesión de rodilla tuvo que pasar a la defensiva.
Casualmente o no, varios problemas con Jim Harbaugh no amalgamaron una gran relación, a pesar de que Sherman siempre se ha dirigido con elogios al actual coach de los 49ers. Ambos han vivido estos años de éxito contemporáneamente. Sherman a Seattle el mismo año que Harbaugh dejó el Cardinal y se unió a los 49ers. Sherman fue elegido en quinta ronda, por ende, es uno de los grandes robos de Draft de los últimos años.
La influencia de Pete Carroll, otro gran coach universitario, que seguramente tenía fichado a Sherman desde antes es notoria. Él y su coordinador defensivo lo han potenciado. Hoy es un esquinero muy físico que te impone un rigor complicado para cualquier receptor, no cualquiera se la banca. Además, fuerza a que tu mariscal tenga que tirar los mejores pases para que le atrapes, esto lo hace un esquinero distinto.
El domingo 2 en New York es uno de los llamados a brillar en el Super Bowl. Esperemos que lo haga, amen del resultado, para el espectáculo suma mucho ver una gran actuación del mejor esquinero en la actualidad de la NFL. Perdon, en contra del mejor mariscal de la actualidad. Imperdible.
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